Seguro que alguna vez os habreis parado a pensar, si la “ñ” solo existe en castellano, y el castellano viene del latín, ¿porque no hay “ñ” en latin?.
Pues la respuesta es que la letra “ñ” no existe en latín porque fue creada por amanuenses y clérigos al escribir en sus códices la “n” repetida, lo que hacían era colocarla una encima de otra para ahorrar espacio, trabajo y tiempo; y la de arriba la dibujaban muy pequeña, pues eso es la virgulilla: otra “n” diminuta. Las enes de “annus”, por ejemplo, derivaron en “año”, al abreviarse en el papel y en el paladar.
Por eso casi todas las palabras con doble nn en latin son ñ en castellano, pero algún observador avispado dirá que el nombre de nuestro País, España, es una derivación del término latino “Hispania”, aqui lo que sucedió es que, con la palatalización y la epéntesis de “ni”, devino en “España”. Con tan española “ñ”, ahora al fin reconocible en internet, si lo pensamos bien, hasta la “ñ” es un reflejo del caracter castizo español, tanto por ser imaginativo como por ahorrar siendo un modo de hacer cicatero, comodón y perezoso.